San Miguel de Tucumán, Historia Viva: una ciudad que vuelve a contarse a sí misma

Hay ciudades que viven en el presente, otras que se refugian en su pasado. Y hay unas pocas, las elegidas, que logran tender puentes entre el ayer y el mañana, dejando que el pulso del tiempo resuene en sus calles, en sus voces, en sus silencios.

San Miguel de Tucumán, donde se declaró la independencia de una nación, está a punto de narrarse de nuevo —con otra mirada, otro ritmo, y sobre todo, con otra voz: la suya.

“San Miguel de Tucumán, Historia Viva” es el nombre del proyecto audiovisual que la Municipalidad de la Capital acaba de lanzar, con la colaboración de uno de los divulgadores históricos más reconocidos del país: Felipe Pigna. Pero más allá del nombre y de la figura prestigiosa que lo acompaña, el proyecto es una invitación a mirar la ciudad no solo como un mapa de calles y monumentos, sino como un organismo vivo, donde la historia todavía late.

Un documental para mirar la ciudad desde adentro

El eje central de la iniciativa será un documental de 70 minutos que recorrerá los múltiples rostros de San Miguel: su historia fundacional, su rol protagónico en la gesta de la Independencia, sus transformaciones sociales, su efervescencia cultural, y su proyección hacia el futuro. No será una lección de historia encorsetada: la apuesta es una narrativa visual vibrante, donde convivirán imágenes de archivo, entrevistas con referentes locales, animaciones, música original y relatos íntimos de quienes construyen, día a día, la identidad de la ciudad.

La realización, encabezada por la Subsecretaría de Prensa y Comunicación Institucional, también incluye una serie de podcasts históricos, que complementarán la experiencia y permitirán escuchar a la ciudad como nunca antes: en la voz de su gente, en las anécdotas heredadas, en los susurros de los barrios donde la historia no duerme.

El relato, desde la raíz

“Queremos contar nuestra historia de primera mano”, dijo con énfasis la intendenta Rossana Chahla, durante el lanzamiento del proyecto en la Casa Museo de la Ciudad. En esa frase vibra una convicción: que nadie puede contar la historia de un pueblo como quienes la viven, la heredan, la sufren y la celebran. Por eso, en este documental, no solo hablarán los libros: hablarán los vecinos, los historiadores tucumanos, los artistas locales, los que guardan en la memoria familiar episodios que aún no han llegado a los manuales escolares.

Junto a Felipe, estará su hijo, Martín Pigna, productor audiovisual, quien aportará el lenguaje de la imagen y el oído afinado para la música regional. La banda sonora del proyecto no será ajena ni prestada: será tucumana, auténtica, sentida.

Historia viva: un paseo por la plaza en la que se luchó por la libertad del país

Una ciudad que no es cualquier ciudad

“San Miguel de Tucumán no es cualquier ciudad”, dijo Pigna padre. Y tiene razón. Aquí no solo se declaró la independencia argentina: aquí la historia se desató como una llamarada, y luego fue tomando forma de universidad, de partido político, de huelga obrera, de zamba nocturna, de plato compartido en la mesa familiar.

Este documental quiere ir más allá del acto patrio: quiere recuperar las historias mínimas, las otras epopeyas, esas que no aparecen en los libros de texto pero modelan el alma de un pueblo. Los clubes de barrio, los cafés donde se gestaron debates memorables, los murales que hablan cuando se los mira con atención, los mercados donde se cocina la cultura con el mismo condimento que los tamales: la pasión.

Una producción colectiva, como la memoria

El espíritu de esta producción no es el de una mirada impuesta desde afuera. Al contrario, tanto Felipe como Martín Pigna destacaron la importancia de trabajar codo a codo con los historiadores locales, los verdaderos guardianes del pasado tucumano. “No está bueno que venga alguien de Buenos Aires a contarte la historia de Tucumán”, dijo el joven productor, con una honestidad que resuena como principio rector del proyecto.

Es que la historia no se impone, se construye. Y en esta reconstrucción, la ciudad toda se vuelve protagonista. Desde los archivos hasta los recuerdos familiares, desde las plazas coloniales hasta los grafitis urbanos, cada rincón puede ser una puerta a una anécdota, una emoción, una verdad.

Un espejo hacia el futuro

El estreno del documental está previsto para septiembre, en coincidencia con un nuevo aniversario de la fundación de la ciudad. No será solo una celebración del pasado, sino una mirada esperanzada hacia lo que vendrá.

Como bien dijo la intendenta Chahla: “La historia es un puente entre el pasado y el futuro”. Y en ese puente, San Miguel de Tucumán se prepara para cruzar de nuevo, esta vez con su voz más clara, más plural, más suya.

 “San Miguel de Tucumán, Historia Viva” no es solo un documental. Es una carta de amor a la ciudad, escrita en imágenes, sonidos y palabras. Es una invitación a recordar, a revalorizar, a reaprender. Pero sobre todo, es una oportunidad única para que los tucumanos y las tucumanas vean reflejada su historia no como un relato ajeno, sino como una memoria compartida que sigue escribiéndose día a día.